Permite manifestar ante la Superintendencia de Salud el descontento de un paciente del sistema de salud público o privado, cuando siente que sus derechos han sido vulnerados durante su atención en salud en un Prestador Institucional (centro médico, hospitales y clínicas).
Estos reclamos pueden ser efectuado por el paciente afectado o quien lo represente, quien deberá adjuntar poder simple otorgado ante notario. El trámite se puede realizar durante todo el año.