Esta certificación tiene una vigencia de 3 años y significa que quienes cuentan con ella cumplen con altos estándares de calidad que buscan resguardar la seguridad de la atención que reciben las personas.
16 de diciembre de 2022
La Superintendencia de Salud otorgó certificación a establecimientos de distintas regiones del país que acreditan que cumplen con altos estándares en la atención que brindan a las usuarias/os.
En la comuna de San Joaquín, se entregó este sello al Cesfam Santa Teresa de Los Andes y en Chillán, el Cesfam Sol de Oriente recibió el certificado por parte de la Agente de la Región de Ñuble, Paola Arriagada. También se brindó el reconocimiento a Policenter La Florida y al Centro Médico Irarrázaval.
Asimismo, en la región de Coquimbo, el Superintendente de Salud, Dr. Víctor Torres, junto a la Intendenta de Prestadores, Carmen Monsalve, acompañados de nuestra Agente, Viviana Novoa, encabezaron las ceremonias de acreditación del Cesfam Rural Pan de Azúcar y del Hospital Dr. José Luis Arraño de Andacollo.
En la región Metropolitana, recibieron esta certificación el Centro del Cáncer Nuestra Señora de la Esperanza, en la comuna de Santiago, y en Puente Alto, el Cesfam San Alberto Hurtado y el Cesfam Madre Teresa de Calcuta, recintos pertenecientes a la Red de Salud UC CHRISTUS y, los dos últimos, además son parte del proyecto Ancora.
En la región del Maule, la Agente Romina Angulo entregó este sello el Cesfam Curicó Centro y al Cesfam Romeral.
¿Qué significa que un centro de salud esté acreditado en calidad?
Que en ese lugar hay protocolos establecidos para los procedimientos que se efectúan; que las instituciones se preocupan de medir el desempeño de estos procedimientos; que los equipos médicos que se utilizan tienen un programa de mantenimiento preventivo que permita proteger su buen estado, disponibilidad y funcionamiento apropiado, entre otros. Todo con el objetivo de prevenir un potencial daño para las y los pacientes y velar porque las prestaciones que se otorgan en estos recintos cumplan con la calidad necesaria para resguardar la seguridad de los procedimientos que se aplican a personas que se atienden.