El establecimiento cumplió con el 90,6% de las características totales (obligatorias y no obligatorias).
19 de abril de 2016
El Superintendente de Salud, Sebastián Pavlovic y el Intendente de Prestadores, Enrique Ayarza, entregaron el certificado y la placa de acreditación en calidad a la Directora del Hospital de Niños Roberto del Río, tras cumplir exitosamente el proceso con el cumplimiento de las características obligatorias y no obligatorias, exigidas para lograr el sello.
En la ceremonia, donde participó el director del Servicio de Salud Metropolitano Norte, doctor Alfonso Jorquera y más de un centenar de funcionarios del recinto, el Superintendente destacó el trabajo de los equipos «trabajaron duro tanto para lograr este sello, como para obtener la autorización sanitaria. Hoy el Hospital y sus 1.200 trabajadores, que han decidido elevar sus estándares de calidad y seguridad para otorgar prestaciones más seguras, tendrán la misión de ofrecer un trato más digno y humanizado».
En este sentido, Pavlovic destacó la labor de quien originalmente encabezó este exitoso proceso, «o podría seguir aquí frente a ustedes sin rendir un homenaje María Teresa Inzunza, líder de este proceso de acreditación cuando comenzó en el 2007; incansable en su objetivo de elevar los estándares de calidad, y exitosa en la tarea de convocarlos a todos. Hoy María Teresa ya no nos acompaña, aunque estoy seguro que desde donde esté comparte este éxito con ustedes hoy».
El equipo de calidad también estuvo compuesto por la Subdirectora del establecimiento, doctora, la enfermera María Angélica Contreras Muñoz, Jefa de la Unidad de Calidad, y también por María Loreto Lizana, Carolina Zarricueta Agurto y Eloísa Orellana Martínez.
A su vez, el Intendente de Prestadores, doctor Enrique Ayarza, destacó que «el sello de la acreditación dura tres años, pero no es sinónimo de Infalibilidad. Son tres años que podrán brindar atención AUGE GES a los niños y niñas que lo requieran de la zona norte de la región Metropolitana, muchas veces también de la Región de Atacama y Coquimbo, aunque por la complejidad de sus patologías, las puertas de este hospital ven entrar y salir a infantes que provienen de todo el país. de todos quienes la requieran.»